Artículo de información

José Carlos Botto Cayo y Abel Marcial Oruna Rodríguez

31 de mayo del 2025

En el mundo de la literatura contemporánea, hay obras que nacen desde la experiencia viva y buscan trascender las páginas para abrazar las historias de los demás. Nos pasa a todas es un libro que reúne las voces de mujeres comunes, mujeres que decidieron compartir sus vivencias más personales a través de las ondas radiales y que ahora, gracias a la pluma de Rosmery Valdez y Robert Miranda, encuentran un refugio en el papel. La publicación no solo preserva estos testimonios, sino que los convierte en un espejo colectivo en el que muchas otras mujeres pueden reconocerse.

La obra fue presentada el pasado 28 de mayo en la Casa de la Literatura Peruana, lugar emblemático para las letras nacionales. Allí, en un ambiente íntimo y reflexivo, los autores compartieron con el público detalles sobre el proceso de creación, y los asistentes pudieron acercarse a las emociones contenidas en cada historia. Más allá de un simple evento de lanzamiento, la presentación fue un encuentro de memorias y sensibilidades, una reafirmación de la importancia de escuchar y compartir aquellas experiencias que nos hacen humanos.

Rosmery Valdez: Una vida dedicada a escuchar

Rosmery Valdez es mucho más que una voz reconocida en la radio peruana. Comunicadora social de formación, ha dedicado su carrera a tender puentes entre las historias de sus oyentes y el gran público. Durante años, su espacio en Radio Felicidad del Grupo RPP se ha convertido en un lugar de confianza para miles de personas, particularmente mujeres, que encuentran en su tono cálido y cercano un refugio frente a las adversidades cotidianas.

Su camino profesional no ha sido improvisado. Valdez estudió Ciencias de la Comunicación y desde sus inicios en medios como ATV y Onda Cero mostró una inclinación natural por contenidos que apelaran a la emocionalidad y la reflexión. Esta sensibilidad fue la que, con el tiempo, le permitió consolidarse como una figura respetada en el ámbito radial. La comunicación, para ella, no es unidireccional: es un acto de reciprocidad, un diálogo constante con quienes la escuchan.

Más allá de su trabajo frente al micrófono, Rosmery también ha incursionado en la docencia en el Instituto SISE, donde comparte su experiencia con futuras generaciones de comunicadores. Esta faceta demuestra su compromiso con la formación y el fortalecimiento del pensamiento crítico en los jóvenes, quienes ven en ella un modelo de profesionalismo y ética laboral. Además, ha colaborado en campañas de responsabilidad social, como las promovidas por el Ministerio de Salud, llevando mensajes de prevención y autocuidado a distintas audiencias.

Valdez es, en esencia, una narradora de lo cotidiano. Su talento no radica solo en hablar, sino en saber escuchar con empatía y transformar esas historias recogidas en enseñanzas compartidas. Nos pasa a todas es la extensión natural de ese don, una forma de honrar y dar permanencia a las voces que la han acompañado durante años.

El alma de Nos pasa a todas

El libro Nos pasa a todas surgió de una necesidad profunda: rescatar del anonimato las experiencias de vida que, día a día, llegaban a la cabina de radio donde Rosmery Valdez escuchaba y acompañaba. Estas historias, reales y diversas, constituían un tejido de emociones que no debía perderse en el aire efímero de las ondas radiales. Así nació la idea de compilarlas en un libro que les diera permanencia y alcance más allá de los horarios de emisión.

Cada relato contenido en la obra es un testimonio de vida. Mujeres de distintas edades y contextos comparten sus luchas, sus triunfos, sus pérdidas y sus descubrimientos. Temas como la violencia emocional, la maternidad en condiciones adversas, la superación personal y el duelo son tratados con una sensibilidad que respeta la intimidad de cada historia. No hay juicios ni conclusiones forzadas: hay, sobre todo, un profundo respeto por la experiencia ajena.

Un personaje central, Lucía, sirve como hilo conductor de las narraciones. A través de su voz, el lector se acerca a cada testimonio con la misma cercanía que caracteriza la relación de Rosmery con su audiencia radial. Esta construcción narrativa ofrece un acompañamiento cálido, casi confesional, que facilita la identificación del lector con las protagonistas de las historias.

La coautoría de Robert Miranda, escritor y editor con experiencia en proyectos similares, aporta al libro una estructura sólida y un tono uniforme que respeta la esencia de cada relato. Juntos, Valdez y Miranda logran una obra que es al mismo tiempo coral y coherente, íntima y colectiva, capaz de emocionar sin caer en sentimentalismos.

Una presentación cargada de emociones

El lanzamiento oficial de Nos pasa a todas se llevó a cabo en la Casa de la Literatura Peruana, un espacio simbólico que rinde homenaje a las voces literarias del país. La elección de este lugar para la presentación no fue casual: la Casa de la Literatura representa el compromiso con la palabra y la memoria colectiva, valores que el libro también defiende.

El evento reunió a figuras del ámbito cultural, colegas de Rosmery Valdez en los medios de comunicación y un público diverso que se acercó movido por el interés en las historias que el libro recoge. Durante la presentación, los autores compartieron anécdotas sobre la génesis del proyecto, las dificultades enfrentadas y la emoción de ver plasmadas en papel tantas voces femeninas.

Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue la lectura en voz alta de fragmentos seleccionados. La misma Rosmery Valdez, acompañada de invitadas especiales, dio vida a las palabras escritas, llenando la sala de una atmósfera íntima y reflexiva. Los aplausos al finalizar cada lectura no solo fueron un reconocimiento al trabajo literario, sino también un homenaje a las mujeres cuyas historias fueron compartidas.

Además, la presentación sirvió como plataforma para reflexionar sobre el papel de la literatura en la visibilización de realidades sociales que, de otro modo, podrían permanecer invisibles. Los participantes coincidieron en la necesidad de abrir más espacios para que voces como las recogidas en Nos pasa a todas encuentren eco en la sociedad.

Impacto y trascendencia

Desde su publicación, Nos pasa a todas ha sido recibido con entusiasmo tanto por el público como por la crítica. Lectores y lectoras destacan la honestidad y la empatía con las que están narradas las historias, así como la importancia de contar con espacios que validen las experiencias femeninas. En un contexto en el que las voces de las mujeres siguen luchando por ser escuchadas plenamente, libros como este adquieren un valor innegable.

El éxito de la obra también ha quedado reflejado en la respuesta en redes sociales, donde muchas lectoras han compartido sus impresiones y agradecimientos por un libro que sienten cercano y necesario. Rosmery Valdez ha utilizado sus plataformas digitales para seguir difundiendo fragmentos del libro, manteniendo así vivo el diálogo con su audiencia y ampliando el alcance de las historias que recoge.

Pero más allá del impacto mediático, Nos pasa a todas ha logrado algo más profundo: construir un puente de solidaridad entre mujeres. Al leer los relatos de otras, muchas han encontrado consuelo y fortaleza, reconociendo que sus propias vivencias no son únicas y que, en la diversidad de las experiencias, hay siempre un hilo común de humanidad.

En definitiva, Nos pasa a todas es un testimonio valiente y necesario. No solo da voz a quienes muchas veces son silenciadas, sino que invita a todos sus lectores a mirar de frente la vida real, con sus luces y sombras, y a reconocer en esas historias fragmentos de su propia existencia.