La poesía silenciosa
crece en el interior
ante los acordes del viento
que entonan sus notas
Ella embarra el alma
con notas de confusión
como los viejos maestros
que entre acordes sonreían
Es en el viento que existe
aquello que no queremos leer
para no asfixiarnos en planteamientos
como los que piensas al leerme
Salpica el idioma de los idos
en las letras de los poetas
que aun no entienden la necesidad del tiempo
elemento tan etéreo como las sonrisas